lunes, 30 de abril de 2012

Votants mediocres

Ja no llegeixo el diari.

Durant anys el primer que he fet, per deformació professional o per idiosincràsia personal, ha sigut mirar les noticies a Internet. 
El ritual era sempre el mateix: primer El País, després La Vanguardia, el New York Times; i potser, només potser, The Guardian si anava molt assedegada d'informació.

Però ja no ho faig. No puc.
Tot i la meva duresa externa, a mi em penseixen els mals del món. 

Divendres passat, per exemple, a les 16h hora de la costa est entro a mirar els diaris -havia tingut un dia atabalat i no m'hi havia fixat abans. Titulars del dia:

- Pujada de l'IVA l'any vinent a Espanya.
- Els immigrants irregulars no tindran accés a la sanitat pública.
- Tampoc els estudiants majors de 26 anys que mai hagin cotitzat.

I aquí em pregunto: fins quan aguantarem que gent que sempre ha tingut les necessitats bàsiques més que cobertes, ens segueixin governant?

Però m'agradaria anar més enllà, fins quan NO demanarem responsabilitats als que han votat a aquest govern? O a l'anterior, per exemple? Perquè jo ja començo a estar-ne farta que només es culpi als que governen.

Sí, tenim mals polítics: covards, poc instruïts i interessants. Però és que jo no els voto aquests. Així de clar. 


No és que estigui massa contenta amb els representants als que vaig regalar -la paraula és regalar, perquè no els demano res a canvi- el meu vot. És el que tenen les llistes tancades, fetes per acontentar totes les "famiglies" del partit.


En tinc el pap ben ple de votar a mediocres enllistats per raons obscures o terribles (com les quotes). Però encara estic més farta que la gent no valori suficient la importància del seu vot i el regali, desencertadament. I el pitjor, no accepti que part del que està passant avui és per culpa d'un vot mal emès. 


Gràcies votants del PP. Els meus fills pagaran pels vostres errors.

lunes, 23 de abril de 2012

Post desordenado

Sé antes de acabar el post que este va a ser desordenado. Un cúmulo de ideas, experiencias, anécdotas sin ton ni son, y desgraciadamente en tono positivo (que ya se sabe, no saca lo mejor de mí).

Hoy he empezado el día acordándome que ayer tiré una caja a la basura donde tenía una pieza de bisutería. Después en un movimiento gracial muy Pi, me he tirado el té con leche encima, para después al levantarme conseguir también tirar el PC al suelo.

Pero al tiempo que todo son desgracias, hoy he ido en el metro junto a un chico mejicano que transportaba unos 100 globos de colores hinchados en forma de perro.  Y he visto como transportaban una jirafa en un camión por 14st...

En Nueva York cada día ves algo fuera de lo común; conoces a alguien excepcional; o vives alguna experiencia surreal.

Esto me recuerda a una afirmación constante en boca de un amigo polemista: "En Barcelona ya nunca pasa nada." 
Voy a tenerle que dar la razón. No recuerdo salir de mi casa en el Eixample y pensar que podía contemplar algo inusual, bonito o feo. Todo era, siempre, normal.

En cambio aquí, me enamoro a diario de Central Park. De sus cambiantes árboles, de las tonalidades de sus lagos y de los millones de niños y perros que lo pueblan. Así como de los piropos educados que me echan los señores mayores en dominicano pensando que soy gringa (grupo al que pertenezco de primeras) y de los looks de la señoras que pasean de mañana por Madison Avenue.



En Nueva York puedes empezar el día saludando al vecino y que este se ofrezca a bajarte la basura "Because you look so pretty, i don't want you to ruin your outfit." (Para a las dos horas tirarme yo misma el té encima). Para a continuación comer en Washington Square rodeado de hippies auténticos de los 70 mientras The Sartorialist hace foto (a la chica de tu lado). Y puedes acabarlo en una fiesta en una tele china anti-gubernamental, hablando con pintores más bizcos que Trueba admiradores de Zuloaga (y de nuevo, tirarme una cerveza encima yo misma). 

En esta ciudad ves desde dos usuarios de silla de ruedas compartiendo energía cinética, ancianitas que se hacen amigas en Burger King, o a una de las hermanas Olsen (demacrada no, lo siguiente) cenando a tu lado en un sitio barato de burritos en Williamsburg.

Aún no he vivido "Noviembre en Nueva York", pero estoy casi segura que mejor que esta primavera no será.


martes, 10 de abril de 2012

Me encanta...

Me produce una malévola satisfacción ver que “Espe” se ha destapado, aún más, y deja ver su franco-liberalismo. Es decir, su concepción que el mercado lo debe de dominar todo -curioso en alguien que trabaja para la administración pública- con su particular toque pre-democrático, o franquista.


Tampoco comparto su gusto en moda,
 ni en amistades.
Su frase  'El café para todos ha servido para nacionalizar a vascos y catalanes' seguro que la rubricaría el mismísimo Generalísimo desde el Valle.

Está claro que, para la "cultísima" señora Aguirre, ésta crisis está causada por tener 17 comedoras (+ dos ciudades autónomas) también conocidas como casas de amiguitos o sedes de chanchullismo...

No puedo estar más en desacuerdo con mi estimada Esperanza.


Ésta crisis viene de unos señores aún más liberales que ella, que por allá por Wall Street, y dotados de psicopatías peores que la de Hannibal Lecter se jugaban pasta que no tenían.
Evasionista fiscal profesional
y empleador de psicópatas...

La actual recesión económica la parieron ludopatas compulsivos, también llamados financieros, con el respaldo de gobiernos desregulados (y/o metidos en el ajo).  

Y en España, la crisis viene de concepciones culturales:

- Como la de “pegar el pelotazo” o “la de que vivir de alquiler es tirar el dinero”. Una hipoteca basada en un peritaje hinchado del valor del inmueble, y a 40 años... ¿No es tirar el dinero, no? ¿O es una estafa legal, organizada y pensada por señores como el de la corbata roja?


- O de la idea de agarrar votos a cualquier precio, con gobiernos –centrales o autonómicos, y en manos del PP en su mayoría- que buscan votos en la absurdidad: 

 Aeropuerto de Castellón. ¿Hola?

 AVEs directo de la capital a centros económicos del país, como Guadalajara o Cuenca. (Todo pasando, dando sus bonitas vueltas, por tierras propiedad de... ¡La familia de Esperanza Aguirre!).

 Un ejército patético, que ayuda a preservar la paz mundial (¿nadie más ve el oxímoron en este concepto?) lleno de altos cargos, pero ningún soldado raso, destinado a más de 30 países diferentes. 

Demos dinero sin intereses a los bancos, para que ellos después trasladen esa liquidez a las empresas y ciudadanos de a pie. Desgraciadamente, por ahora, sólo ha servido para forrar de billetes a altos dirigentes y darles una abultada pensión; cubrir sus desvanes ludópatas y que algunas entidades llamen para ofrecer pisos embargados a gente con una nómina superior a los 2.000€/mes.

Aunque lo que realmente me produce orgullo y satisfacción, es ver la tumba que se está cavando la propia Familia Real Española. Seguramente, Juanca no lo calificaría de "annus horribilis" como su compañera atrapa-impuestos inglesa, sino de "putada" -ya sabemos que este rey es muy campechano.

Traje de talle extra-largo, más corbata y pañuelo Hermés...
En verdad, Froilán no ha hecho nada que su abuelo materno no hubiera hecho con anterioridad. Sólo que tiene menos puntería, y en lugar de apuntar a su hermana, se ha disparado a sí mismo. Ya se sabe que la endogamia crea generaciones menos preparadas…

Algún día alguien tendría que contabilizar lo que costaría pagar a una gran empresa de Relaciones Públicas, y cuánto nos cuesta (directa e indirectamente) la chupóptera familia Borbón.

Naturalmente, y como buena seguidora de Maynard Keynes, me decanto por dejar la representación del Estado en manos del sector privado.

Al final, va a ser que Esperanza y yo estaremos de acuerdo en algo.